En esta época que estamos viviendo, ya es muy común que las empresas se encuentren en constante amenaza de los ciberdelincuentes y enfrenten el peligro latente de brechas de seguridad que pueden desencadenar en pérdidas financieras catastróficas, daño a la reputación y más.
Aquí es donde el "threat hunting" entra en acción. En este artículo te explicamos qué es exactamente y cómo puede convertirse en el escudo para tu empresa contra la ciberdelincuencia.
El threat hunting es una técnica de ciberseguridad proactiva, que investiga amenazas potenciales que las herramientas automatizadas no pueden detectar.
En lugar de esperar a que los sistemas de seguridad reaccionen a un ataque, buscan activamente anomalías o comportamientos sospechosos para detenerlos antes de que causen daño.
A continuación te mencionamos algunas de las características del threat hunting:
En lugar de esperar a que ocurra un incidente de seguridad, los cazadores de amenazas buscan activamente signos de actividad maliciosa para atacarlos antes de que haya daños mayores.
Formulan hipótesis sobre posibles amenazas y luego buscan evidencia que las confirme o refute.
Se realizan análisis detallados de los datos de la red y del sistema para identificar patrones sospechosos que podrían indicar un ataque.
Utilizan información de inteligencia de amenazas para guiar su búsqueda y entender mejor las tácticas, técnicas y procedimientos (TTP) de los ciberdelincuentes.
Aunque pueden emplearse herramientas y algoritmos, los cazadores también dependen, en gran medida, de su experiencia y juicio para identificar actividades sospechosas.
Deben adaptarse constantemente a las tácticas cambiantes de los ciberdelincuentes y mantenerse al día con las últimas tendencias y técnicas de amenazas.
Cuando se detecta un ataque, trabajan en estrecha colaboración con otros equipos de seguridad, como los encargados de respuesta a incidentes, para mitigarla.
Para realizar su trabajo de manera eficiente, utilizan una variedad de herramientas y tecnologías, que pueden incluir soluciones de seguridad de red, herramientas de análisis de datos, software de inteligencia de amenazas, entre otros.
Existen diferentes enfoques para el threat hunting, cada uno con sus propias fortalezas. Aquí te los desglosamos.
El threat hunting es una estrategia de seguridad cibernética esencial que cumple varias funciones vitales en la protección de los sistemas y los datos de una organización. A continuación, te mostramos algunas de las formas clave en las que puede ser útil para tu empresa.
Quizás el beneficio más importante del threat hunting es su capacidad para detectar y prevenir ataques cibernéticos antes de que ocurran.
Al buscar proactivamente amenazas y vulnerabilidades ocultas, pueden mitigar estas antes de que los ciberdelincuentes puedan explotarlas. Esto puede prevenir brechas de datos costosas y proteger la reputación de tu empresa.
El threat hunting no solo se trata de prevenir ataques, sino también de mejorar la capacidad de tu organización para responder a ellos.
Al entender mejor las tácticas, técnicas y procedimientos que utilizan los ciberdelincuentes, puedes desarrollar respuestas más efectivas a los incidentes de seguridad.
Además, puede proporcionar valiosas lecciones que pueden ayudar a afinar tus estrategias de seguridad a largo plazo.
El threat hunting también sirve como una valiosa oportunidad de aprendizaje para tu organización, ya que al realizar la caza de amenazas, puedes descubrir más acerca de cómo los ciberdelincuentes operan y cómo se pueden fortalecer tus defensas.
Esta información puede ser invaluable para formar a tu personal sobre los riesgos de seguridad y cómo pueden contribuir a la postura de seguridad de tu empresa.
Al demostrar que tu organización toma la seguridad en serio y está proactivamente buscando y abordando amenazas, puedes aumentar la confianza de tus clientes en tu capacidad para proteger sus datos.
Esto puede ser un factor diferenciador importante en mercados competitivos y puede ayudar a atraer y retener a los clientes.
Como ya mencionamos, el proceso de threat hunting comienza con la formulación de hipótesis basadas en el conocimiento del cazador sobre las amenazas, los sistemas y los adversarios.
Estas pueden ser tan simples como "los atacantes podrían estar intentando obtener acceso a nuestros servidores" o tan específicas como "los atacantes están utilizando esta técnica particular para evadir nuestra detección".
A continuación, utilizan diversas herramientas y técnicas para buscar evidencia que confirme o refute sus hipótesis. Esto puede implicar el análisis de registros de eventos, la monitorización de la red, la investigación de malware y otras de análisis de datos.
Si se detecta una amenaza, el equipo de threat hunting trabajará con el de respuesta a incidentes para mitigarla. Por el contrario, si no se detecta ninguna, las hipótesis se refinarán y el proceso comenzará de nuevo.
Para implementar el threat hunting en una organización, es necesario seguir una serie de pasos. Aunque estos pueden variar dependiendo de las circunstancias específicas de cada organización, aquí te presentamos un esquema general para ayudarte a comenzar:
El primer paso es entender completamente tu entorno de IT, incluyendo los sistemas, redes, y aplicaciones que estás usando. Esto también implica entender cuáles son tus activos más valiosos y dónde se encuentran, ya que estos son los objetivos más probables de un ataque.
Necesitarás un equipo dedicado de profesionales de seguridad que se especialicen en threat hunting.
Estos individuos deberían tener una combinación de habilidades técnicas y analíticas, incluyendo conocimientos en forense digital, análisis de malware, inteligencia de amenazas y otros campos relevantes de la ciberseguridad.
Existen numerosas herramientas que puedes usar para facilitar tus esfuerzos de threat hunting.
Estas pueden incluir soluciones de seguridad de red, plataformas de análisis de seguridad, soluciones de inteligencia de amenazas y otras tecnologías.
La clave es seleccionar las que mejor se adapten a tus necesidades específicas y asegurarte de que están correctamente configuradas para maximizar su eficacia.
Con base en tu conocimiento del entorno y las amenazas existentes, el equipo deberá generar hipótesis sobre los posibles ataques que podrían tener lugar. Estas deben ser lo suficientemente específicas para ser útiles, pero también lo suficientemente amplias para cubrir una variedad de posibles escenarios.
Una vez que tienes tus hipótesis, el siguiente paso es comenzar a buscar activamente las amenazas, lo que implica analizar datos de diversas fuentes, como registros de eventos, tráfico de red y otros datos para buscar signos de actividad maliciosa.
Este proceso puede ser tanto automatizado como manual, pero debe ser constante.
Cuando se detecta una amenaza, el equipo debe analizarla y decidir cómo responder. Esto puede implicar la contención del ataque, la eliminación del malware, la reparación de las vulnerabilidades explotadas y la implementación de medidas para prevenir ataques similares en el futuro.
Finalmente, es importante que el equipo aprenda de cada experiencia de threat hunting y se adapte a las nuevas amenazas y tácticas de los ciberdelincuentes, como la actualización de las hipótesis de amenazas, la adopción de nuevas herramientas y técnicas, y la formación continua del equipo.
Vivimos en un mundo cada vez más digital y conectado, en el que las amenazas cibernéticas se han convertido en un desafío diario para las organizaciones de todos los tamaños y sectores.
Por ello, el threat hunting emerge como una estrategia proactiva y dinámica para combatir el ciberdelito y proteger los valiosos activos digitales de una empresa.
Más allá de la prevención de amenazas, también tiene un valor educativo considerable, pues a través de esta práctica, las organizaciones pueden adquirir una comprensión más profunda de las tácticas de los ciberdelincuentes y utilizar estos conocimientos para fortalecer sus defensas y entrenar a su personal.
En definitiva, el threat hunting es una inversión que vale la pena considerar para cualquier organización que se tome en serio la seguridad cibernética. A través de esta práctica, no solo podrás proteger mejor tu empresa contra las amenazas actuales, sino que también estarás preparándote para los desafíos del futuro en el ciberespacio.